Las mujeres tienen dos ovarios que se encuentran en la pelvis y que se comunican con el resto del aparato reproductor femenino por las trompas. Su función principal es la reproducción y, supeditada a ésta, la producción de hormonas femeninas. Los ovarios tienen un recubrimiento formado por células epiteliales. De la transformación maligna de estas células surge la inmensa mayoría de los cánceres de ovario. Es el tercer tipo de cáncer más frecuente del aparato reproductor femenino y mueren más mujeres de cáncer de ovario que de cualquier otro que afecte al aparato reproductor.
El cáncer de ovario es menos frecuente en las mujeres que han tenido varios embarazos. También es menos frecuente entre las mujeres que han tomado anovulatorios (anticonceptivos) orales durante años. No obstante, ningún estudio ha demostrado que esa menor probabilidad de cáncer de ovario en las mujeres que han tomado anticonceptivos se vea compensada por otros efectos secundarios, como el aumento de incidencia de enfermedades cardiovasculares y, posiblemente, de otros tumores. Por eso no está justificado su uso preventivo en la población general. Un caso especial son las mujeres de muy alto riesgo, como aquellas con un síndrome hereditario de cáncer de mama y ovario (BRCA), en las que se está estudiando el papel protector de los anovulatorios e incluso, puede proponerse a la paciente, la extirpación de ambos ovarios a partir de los 35 años si ya ha cumplido sus deseos de descendencia.
Según los datos que maneja la organización World Ovarian Cancer Day (Día Mundial del Cáncer de Ovario), entre un 15 y un 20 por ciento de los casos de cáncer de ovario que se registran en el mundo tienen un factor genético. Esto quiere decir que tener un pariente por consanguinidad (madre, hermana, abuela, tía, etcétera) que haya padecido cáncer de ovario a cualquier edad, o cáncer de mama antes de los 50, es una alerta para extremar los controles que permitan una detección precoz.
El diagnóstico de cáncer de ovario en sus primeros estadios es difícil de establecer, porque los síntomas habitualmente no aparecen hasta que el cáncer se ha diseminado y porque muchas otras enfermedades menos graves tienen síntomas similares. Con frecuencia, los síntomas del cáncer de ovario se confunden con problemas gastrointestinales.
El diagnóstico suele sospecharse cuando se detecta una masa pélvica en una revisión ginecológica de rutina. La ecografía, la tomografía axial (TAC), la resonancia magnética y un análisis de sangre llamado CA-125 hacen más firme esta sospecha que tendrá que confirmarse en la operación.
Fuente: https://cuidateplus.marca.com/enfermedades/cancer/cancer-ovarios.html
El grupo de pruebas analíticas para los virus de la hepatitis corresponde a una serie de exámenes utilizados para detectar infección actual o previa por hepatitis A, hepatitis B o hepatitis C. Se pueden examinar muestras de sangre para más de un tipo de virus de la hepatitis al mismo tiempo.
Las pruebas de antígenos y anticuerpos pueden detectar cada uno de los diferentes virus de la hepatitis.
Nota: la hepatitis D solo causa enfermedad en personas que también tengan hepatitis B y no se revisa de manera rutinaria en una serie de pruebas analíticas para anticuerpos de la hepatitis.
La sangre se extrae a menudo de una vena de la parte interior del codo o del dorso de la mano. El sitio se limpia con un desinfectante. El laboratorista envuelve una banda elástica alrededor de la parte superior del brazo con el fin de aplicar presión en la zona y hacer que la vena se llene de sangre.
Luego, el proveedor de atención médica introduce suavemente una aguja en la vena y recoge la sangre en un tubo hermético pegado a la aguja. La banda elástica se retira del brazo. Una vez que se ha recogido la muestra de sangre, se retira la aguja y se cubre el sitio de punción para detener cualquier sangrado.
La muestra de sangre se procesa en un laboratorio. Los exámenes de sangre (serología) se utilizan para verificar si hay anticuerpos contra cada uno de los virus de la hepatitis.
https://medlineplus.gov/spanish/ency/article/003558.htm
La prueba de la hepatitis no requiere ningún preparativo especial.
Los riesgos de un análisis de sangre son mínimos. Tal vez sienta un dolor leve o se le forme un moretón en el lugar donde se inserta la aguja, pero la mayoría de los síntomas desaparecen rápidamente.
Un resultado negativo significa que usted probablemente no está infectado. Un resultado positivo puede significar que usted tiene o ha tenido hepatitis A, B o C. Tal vez necesite más pruebas para confirmar el diagnóstico. Si tiene preguntas sobre sus resultados, consulte con su médico o profesional de la salud.
Hay vacunas para la hepatitis A y la hepatitis B. Hable con su médico o profesional de la salud para averiguar si usted o sus hijos deberían vacunarse.
https://medlineplus.gov/spanish/labtests/hepatitispanel.html
¿Conoce la hepatitis? Actúa ya…..
Es una oportunidad para redoblar los esfuerzos nacionales e internacionales de lucha contra esta enfermedad e instar a los asociados y a los Estados Miembros a que presten su apoyo a la aplicación de la primera Estrategia Mundial del Sector de la Salud contra las Hepatitis Víricas para 2016-2021, aprobada en la 69.a Asamblea Mundial de la Salud, en mayo de 2016.
La nueva estrategia contiene las primeras metas mundiales con respecto a las hepatitis víricas, entre las que se encuentran la reducción de los nuevos casos de hepatitis B y C en un 30% y la reducción de la mortalidad en un 20% para 2020.
Las principales medidas consistirán en ampliar los programas de vacunación contra la hepatitis B; mejorar la seguridad de las inyecciones, transfusiones e intervenciones quirúrgicas; ampliar los servicios de “reducción de daños” para los consumidores de drogas por vía parenteral, y el aumento del acceso al diagnóstico y tratamiento de las hepatitis B y C.
Conoce las hepatitis y actúa ya
En el Día Mundial contra las Hepatitis la OMS hace un llamamiento a los formuladores de políticas, los profesionales sanitarios y la población para que “conozcan las hepatitis y actúen ya”.
La Organización insta a las personas a que se informen sobre la infección, tomen medidas positivas para saber si están infectadas mediante la realización de pruebas, y busquen tratamiento para reducir las muertes evitables por estas infecciones prevenibles y tratables.
Habrá actividades en todo el mundo para mejorar los conocimientos de la población sobre el riesgo de hepatitis y mejorar el acceso a los servicios de diagnóstico y tratamiento.
Las hepatitis víricas (A, B, C, D y E) son un grupo de enfermedades infecciosas que afectan a millones de personas en todo el mundo, causan hepatopatías agudas y crónicas, y matan a cerca de 1,4 millones de personas al año, en su mayoría por hepatitis B y C. Según las estimaciones, solo el 5% de las personas con hepatitis crónica saben que están infectadas, y son menos del 1% quienes tienen acceso al tratamiento.
Conoce las hepatitis — ¿estás en riesgo?
Conoce las hepatitis — hazte pruebas
Conoce las hepatitis — busca tratamiento
http://www.who.int/campaigns/hepatitis-day/2016/event/es/ Campañas mundiales de salud pública de la OMS